El territorio Palestino ocupado pierde por lo menos 306 millones de dólares al año en ingresos públicos que van a parar a Israel, según un nuevo estudio

El Territorio Palestino Ocupado pierde por lo menos 306 millones de dólares de los Estados Unidos anuales en ingresos por concepto de derechos de aduana e impuestos específicos y sobre el valor añadido que Israel no transfiere a la hacienda palestina, según un nuevo estudio de la UNCTAD.

En el estudio se señala que la pérdida de ingresos fiscales asciende al 3,6% del producto interno bruto (PIB) y el 18% de los ingresos fiscales de la Autoridad Nacional Palestina.

En el estudio, titulado Palestinian Fiscal Revenue Leakage to Israel under the Protocol on Economic Relations (Pérdida de ingresos fiscales palestinos en favor de Israel en el marco del Protocolo sobre las Relaciones Económicas), se indica que los ingresos públicos palestinos perdidos darían a la Autoridad Nacional Palestina una mayor capacidad para estimular la economía y aumentar el PIB anual en cuatro puntos porcentuales y crear 10.000 puestos de trabajo adicionales al año

A fin de atajar estas pérdidas, en el estudio se formulan recomendaciones para su transformación en un marco más equilibrado en consonancia con las realidades de la economía palestina, que han cambiado mucho desde 1994. Por ejemplo, se propone modificar el Protocolo de París (1994), que sigue siendo el marco general por el que se rigen las relaciones comerciales y las políticas económicas y fiscales palestinas.

Según el estudio, en un informe del Banco Central Israelí se indica que el 39% de las importaciones palestinas procedentes de Israel tiene su origen en terceros países y se despachan como importaciones israelíes antes de ponerse a la venta en el Territorio Palestino Ocupado como si se hubieran producido en Israel. Las autoridades israelíes recaudan los ingresos aduaneros de estas "importaciones indirectas", pero no se transfieren a la Autoridad Nacional Palestina.

Además, la falta de control de la Autoridad Nacional Palestina sobre las fronteras de Palestina hace que el contrabando desde Israel y los asentamientos israelíes sea otra fuente de pérdidas significativas de ingresos fiscales. El valor de los bienes objeto de contrabando desde Israel y los asentamientos israelíes en el Territorio Palestino Ocupado se estima que se encuentra entre el 25% y el 35% de las importaciones totales, según el estudio. Si los bienes contrabandeados se producen en Israel, la Autoridad Nacional Palestina pierde ingresos en concepto de IVA e impuestos específicos. Ahora bien, cuando se trata de bienes producidos en terceros países, la pérdida de ingresos arancelarios —en favor de la hacienda israelí se suma a la recaudación no percibida del IVA y del impuesto específico.

En el estudio se subraya que hay otros costos de producción y empleo para la economía palestina. Estos costos constituyen la medida en que la economía palestina habría podido aumentar el PIB y el empleo si se hubieran reducido estas pérdidas, y se hubiera transferido el dinero desde la hacienda israelí a la palestina, como se pide en el Protocolo de París.

Además, la importante pérdida de recursos perpetúa la fragilidad fiscal de la Autoridad Nacional Palestina y socava su capacidad para la planificación fiscal, así como su capacidad para financiar gastos de desarrollo y dirigir la macroeconomía hacia la maximización del crecimiento y la creación de puestos de trabajo, según el estudio.

En el estudio se pone de relieve, no obstante, que la pérdida anual estimada de ingresos fiscales hasta ahora es parcial y conservadora, y señala la necesidad de seguir investigando para cuantificar las pérdidas de ingresos de muchas otras fuentes, como las siguientes:
• Ingresos no transferidos procedentes de los impuestos recaudados por Israel y los asentamientos israelíes sobre los ingresos de los palestinos que trabajan en los asentamientos israelíes;
• Pérdidas sufridas por la utilización de la moneda israelí dominante;
• Pérdidas de ingresos relacionadas con la falta de control sobre las tierras y los recursos naturales palestinos;
• Pérdidas sufridas por el sector público palestino de recursos financieros relativos a la importación de petróleo, energía y agua.

En el estudio se recomienda que se permita a la Autoridad Nacional Palestina el pleno acceso a todos los datos sobre las importaciones que proceden o transitan por Israel cuando el destino final de consumo sea el Territorio Palestino Ocupado, que se supriman los plazos que impiden a la Autoridad Nacional Palestina reclamar sus ingresos, que se ponga fin a la dependencia palestina respecto de Israel eliminando los obstáculos al comercio con países distintos de Israel y que se faciliten a la Autoridad Nacional Palestina los recursos financieros y humanos necesarios para fortalecer su capacidad de administración aduanera.